El 26 de febrero de 2015 se hubieran celebrado elecciones en Ucrania si hace algo más de un año un minoritario grupo de personas pagadas y organizadas por USA y la OTAN, entre los cuales había un núcleo dirigente de nazis, no hubiesen dado un golpe de Estado violento.
El Presidente de Ucrania no era de mi agrado porque no era comunista, pero era el elegido legal y democráticamente.
Este fue el segundo golpe se estado, tras la "involución naranja" que duró muy poco ya que había sido derrotada en las urnas con todos los observadores del mundo vigilando la legalidad de las mismas.
Probablemente EEUU y la OTAN sabían que en estas elecciones de 2015 tampoco ganarían los que ellos querían porque no se explica de otra forma que no pudieran esperar un año para que sus acólitos se hicieran con el poder de forma pacífica.
Hace poco más de 1 año, antes de los disturbios provocados esencialmente por radicales capitalistas y nazis, Ucrania tenía unos indicadores económicos que eran , en muchos sentidos, mejores que los de España y otros países europeos. Hoy está mucho más endeudada y en guerra con las regiones antifascistas que han decidido no ser satélites de la OTAN, de EEUU y de los nazis.
La pena es la de la gente que ha muerto durante las revueltas para que alcanzase el gobierno de Kiev una oligarquía afín a las potencias occidentales colonialistas y la fallecida durante este año en una guerra atroz provocada por la agresión expansionista de los intereses económicos y territoriales defendidos por esas potencias occidentales.
¿Cómo ha afectado en sólo 1 año, aquella intervención violenta contra el gobierno legalmente electo, a la zona ucraniana que gobierna la dictadura pro-otanista de Kiev en colaboración con grupos nazis?
Un estudio reciente del Instituto Cato citado en un blog del Washington Post afirma que la tasa de inflación de Ucrania es ahora, en 2015, del 272 % , y no el 28,5% como quiere hacer creer, oficialmente, el régimen de Kiev.
Desde 2014 casi 40 bancos han quebrado, entre ellos el cuarto mayor banco del país, el Delta Bank, a principios de 2015.
Mientras el mayor banco, Privatbank, que es propiedad del oligarca del régimen, Ihor Kolomoysky, ha recibido una ayuda de emergencia del gobierno por un importe de 28.9 mil millones de dólares.
Los tipos de interés de los bancos han subido, para intentar frenar la inflación, hasta el 30%.
De acuerdo con el Servicio de Estadística de Ucrania, los salarios reales en los territorios controlados por el gobierno pro-OTAN cayeron un 17,3 por ciento en 2014.
Los educadores tuvieron un recorte salarial medio del 25%, mientras que para los trabajadores de la sanidad el recorte medio fue del 8,7 por ciento, sin incluir los despidos.
Desde enero de 2014 hasta 2015 el consumo real de los ucranianos cayó el 40 por ciento.
La moneda de Ucrania ha perdido el 70 por ciento de su valor.
El afán exportador del régimen provocó en el mercado interno una subida del 91% en el precio medio de las frutas, verduras y grano durante 2014.
 |
| Un supermercado en Kiev -Ucrania- |
En el último trimestre de 2014 el PIB del país se derrumbó un 15,2%.
Tanto el Banco Mundial como el FMI, promueven las privatizaciones, los salarios de hambre y la indigencia al imponer su política extremista y radical a cambio de disparar la deuda de los ucranianos con préstamos de decenas de miles de millones dólares, entregados a la fascistocracia que se ha echo la dueña del gobierno gracias a la intervención de las potencias colonialistas occidentales.
Otros datos:
La tasa de desempleo en Ucrania, a principios de 2012, la más baja de Europa (1,9%)En enero de 2014, antes del triunfo del golpe de estado, la tasa de desempleo seguía en el 1,9% de la población, según la página de estadísticas del actual gobierno pro-otanista de Kiev
No hay comentarios:
Publicar un comentario